Organizados en clanes, microsociedades en la que rige una ultraviolencia que roza la barbarie, los Asaltantes hacen saber de su presencia en cada uno de los planetas depósito. Tan solo la falta de unidad y cohesión ha evitado hasta ahora que los Asaltantes lleguen al estatus de gran potencia, pero aquel que consiga someter y unificar los clanes dispondrá de unas importantes tropas de choque que desplegar en la guerra del eterio.

Los Parásitos, que infestan ciertos planetas depósito, son unas temibles criaturas que se alimentan de eterio. Aunque el sentir general es que su total erradicación sería la acción más correcta, ciertos científicos abogan por estudiarlos, argumentando que es posible controlarlos y usarlos como arma, un arma que acabaría con sus adversarios sin dudarlo.

Los Guardianes son drones autónomos con una IA limitada. Rechazan todo tipo de comunicación y defienden con despiadada eficiencia las viejas colonias devastadas de una raza que lleva milenios extinguida. Cualquiera capaz de reprogramarlos y de controlarlos tendría un muy buen argumento que colocar sobre el campo de batalla.